Problemas vs soluciones
Hace unos meses me pregunté: ¿Por qué una
situación, o asunto se convierte en un disco rayado que se repite una y otra
vez en la mente? hasta que dejamos la
tranquilidad, creamos ansiedad.
Fue un darme cuenta, una chispa, que me enseñó inmediatamente cual
era la respuesta a la pregunta, recordé que en matemática se realiza
planteamiento del problema a resolver, habiendo dado con anterioridad la o las
operaciones que guían a resolver dicho problema.
Pero la matemática es una ciencia exacta,
la vida no, y por ello se nos presentan problemas o situaciones con variables
que dependen de nosotros y otras que no, alternativas, posibilidades,
combinaciones, operaciones cruzadas, fórmulas que implican riesgo y
consecuencias.
Debemos por tanto, estar conscientes que
tendremos que decidir qué hacer, cuáles son nuestras opciones, nuestra visión global,
nuestra experiencia previa, nuestro nivel de conocimiento de la situación y de
nosotros en ella, vernos desde afuera.
Para resolver, tomé libreta e inicie a realizar
planteamientos de un problema que en este momento me daba vueltas y vueltas, lo
escribí con todos sus detalles, al escribirlo
y describirlo lo saqué de dar vueltas y lo coloqué en perspectiva, viéndolo de
esta manera ya no daba vueltas, estaba frente a mí.
¿Entonces?
¿Ahora? a dar respuesta, escribí varias alternativas, opciones, que podrían ser.
Le saqué el pro y contra a cada una, me coloqué fuera y me pregunté: ¿he tenido
algo así antes? ¿qué hice? ¿Me fue bien en esa situación? ¿Puedo elegir dentro
de estas o ahora analizando mejor tendría otras? ¿Las herramientas de solución
están o debo buscar las que me ayuden a
liderar con la situación?
Me di cuenta, que mis referencias de situaciones
habían sido vividas en la marcha, no ha habido un planteamiento concreto que
abarcara todo el análisis que ahora me planteo por escrito, lo que me permite
no tenerlo en mi mente, sino que al sacarlo y darle códigos, mi memoria, mi
razonamiento se activan a buscar y ofrecer lo existente y lo posible.
Ha sido y es un ejercicio formidable, que
me ha permitido sacar los discos rayados de: ‘¿Qué? ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Por qué?
¿Dónde? Y aplicar las cuatro operaciones aritméticas básicas: suma, resta,
multiplicación, división. Y sobre todo, al utilizarlo me ha permitido que
realizar mejores soluciones, sin sentir que el mundo se derrumba y yo con él.
Todos podemos realizar este ejercicio, que
permitirá con su uso, desarrollar capacidades de resolver problemas de una
forma más efectiva, orientada a hacer decisiones más inteligentes, adecuadas y
a dar de nosotros lo que está en nuestra variable, y lo que no, a entenderlo,
adecuarlo, manejarlo, observarlo, ignorarlo o resolverlo con el análisis
adecuado a cada caso.
Comentarios
Publicar un comentario