Conjugar el verbo Fluir.
Los ríos definidos como corriente natural de agua que fluye permanentemente y va
a desembocar en otra, en un lago o en el mar. Está en constante movimiento, tiene
piedras de distintos tamaños, que le sirven de impulso, pero cuando una
es de gran tamaño no se detiene y queda estancada, ni lucha contra estas, simplemente se van por
otro lado y continúa.
Las lagunas son definidas como aguas estancadas que se alimentan de otros
ríos o arroyos.
Quiero invitar a
los que leen este blog a actuar como el agua
del rio que circula, fluye.
Fluir quiere decir aceptar,
dejar llegar lo que viene, dejar ir lo que se va, lograr fluir implica aceptar
y dejar ir: emociones convertidas en sentimientos(enojo, tristeza), relaciones familiares, de pareja, laborales, que detienen el camino hacia el crecimiento,
el desarrollo, el equilibrio estabilidad, impidiendo el disfrute y el bienestar que existe en fluir.
Dejamos de fluir cuando tenemos la creencia de que para
obtener y mantener vínculos relacionales
hay que sacrificarse, y el sacrificio
sin correspondencia trae frustración y estancamiento.
Hay un refrán que
dice “agua que no has de beber déjala correr” invita a dejar ir, sea lo que sea el agua en
tu vida que ya no beberás, dejarla correr, porque no es útil, ni sano, ni apropiado retener, es solo una ilusión y una fantasía
creer que se tiene sin tomar en cuenta
que el agua se desliza, se va y solo nos
queda la humedad (dolor, ira).
Otro
refrán nos dice “agua pasada no mueve
molino”, invita a no centrarse y
quedarse aferrado a lo que ya paso, porque nos convertiremos en lagunas con aguas estancadas,
perdiendo las oportunidades de fluir y encontrar camino, el agua pasada no puede generar movimiento sino estancamiento, estar
queriendo vivir el pasado, hace seguro que seas laguna en el presente
y te estés quedando sin caminos estancada
en la nostalgia de lo que pudo haber sido y no fue, flagelándote, culpándote, o
maldiciendo y pataleando contra el viento .
La ilustración que
he usado con el agua de rio vs. la de laguna,
es para que se pueda entender como necesidad el fluir, necesitamos movernos, tomar impulsos,
dejar ir, dejar llegar, continuar por
otros caminos, no luchar con la gran piedra para quitarla o estancarnos, sino
irnos por otro lado fluir.
Cuando fluimos
crecemos y aprendemos de las experiencias lo que tenemos que aprender y dejamos las emociones en el tiempo a que corresponden, esto nos permite un
presente con propósitos, un futuro con esperanza.
El final de año se
acerca y la lista de metas, deseos debe iniciar: 1ro. Con aceptar reconocer que
hay cosas y personas que hemos retenido que debieron irse o quizás ya se fueron
y en una idealización creemos que están, 2do. Prepararnos para que lleguen oportunidades o quizás están y no lo
hemos considerado, 3ero. Renovar nuestra manera de pensar basada en creencias que nos hacen quedarnos estancados y
no fluir.
Finalmente quiero
invitarse a fluir, y saber que no hacerlo es como dice la frase de Seneca: El no querer es la causa, el no poder el
pretexto. -
imagen:www.pinterest.es/pin/394909461070695747/
Comentarios
Publicar un comentario